Las características y la calidez que transmite la piedra franca de Villamayor han conseguido ampliar fronteras más allá de la provincia salmantina. El centro de Salamanca ha sido el mejor escaparate para la piedra franca a lo largo de la historia.
La piedra de Villamayor ha sido reconocida nacional e internacionalmente, gracias, también a su utilización en el revestimiento de fachadas de edificios civiles. Sus cualidades han hecho que con el paso del tiempo sea un elemento de construcción muy demandado, sobre todo en la actualidad en su aspecto ornamental y decorativo. En España, son muchas las ciudades que han utilizado la piedra de Villamayor como revestimiento para algunos de sus edificios más emblemáticos, tanto civiles como monumentales.
El edificio de la Estación de Tren de Zamora resulta espectacular a la vista por su carácter monumental y las filigranas que presentan sus torres, todo ello construído en piedra de Villamayor y que fue inaugurado en 1958. Su estilo es neoplateresco y tiene consideración de «estación histórica»
La fachada cuenta con 88 m de longitud formada por tres cuerpos con cuatro torres. En el edificio destaca la crestería superior que recuerda en gran medida a la que presenta en Palacio Monterrey en Salamanca
El actual Cuartel de Caballería de Valladolid se empezó a construir en 1921 y hoy en día está considerado como un edificio de arquitectura historicista y monumental de gran valor de las primeras décadas del siglo XX y que se levanta imponente en el centro de la ciudad frente al Campo Grande
Está reconocido como uno de los monumentos de mayor majestuosidad de Valladolid y está inspirado en las formas del Palacio Monterrey de Salamanca motivo por el que se empleó la piedra arenisca de Villamayor. Impone su fachada longitudinal en la que se aprecian tres cuerpos con tres destacadas torres. El granito del zócalo proporciona el contraste ideal con la piedra franca que consigue que realce aún más la belleza del cambiante colorido de esta piedra
El Ayuntamiento de Logroño se traslado en 1981 a un moderno y singular complejo arquitectónico construido en piedra de Villamayor sobre el solar de un antiguo cuartel en el que destaca sus grandes dimensiones con varios edificios que se disponen entorno a una gran plaza cuadrada
La piedra destaca como elemento utilizado para el revestimiento de la fachada dado que es un edificio de líneas sobrias donde lo más llamativo o de mayor atractivo es la piedra natural empleada en su construcción
Los juzgados de León se encuentran en un edificio de grandes dimensiones en la que la piedra de Villamayor tiene todo el protagonismo. Su estructura libre de artificios y austera consigue que realce aún más si cabe la piedra franca
El principal atractivo de la fachada son las combinaciones de coloridos que desprende la piedra debido a su oxidación y que le permite mostrar diferentes colores según la hora y luz del día desde sus tonos dorados y rosados a los más rojizos. La fachada de los juzgados es un buen reflejo de esta cualidad
El templo de Debod se encuentra en Madrid y la piedra de Villamayor sirvió para restaurar el templo egipcio cuando llegó a España. Se trata de un regalo de Egipto a España como agradecimiento por la ayuda que le prestó en la salvación de los monumentos de Nubia y evitar que quedasen bajo las aguas del río Nasser
El templo se trajo a España piedra a piedra y se construyó de nuevo aunque fue necesaria alguna restauración y añadir más elementos que faltaban del original. Para poder llevarlo a cabo se emplearon más de 900 sillares de la piedra franca de distintos tamaños. Se emplearon en el interior pero sobre todo para reconstruir las fachadas exteriores. La reconstrucción finalizo en 1972